Defensa del Reggaeton

"Que me estoy burlando del sistema,

dando malos consejos a las nenas

que estoy jugando con fuego, 

no entienden que soy el fuego"
Cazzu

Para empezar yo era la típica tipa que se creía muy inteligente para el reggaeton, mi adolescencia descubrió la trova y el rock argentino, amo Silvio, Victor Jara, la Violeta y a Paez, mis veinte me deprimí y escribí entre canciones de Nirvana, Portishead, Radiohead y Tool, me hice fuerte con el punk, Non Servium, Kaos Urbano, Eskorbuto, canté con rabia en mi banda de street punk, los últimos años farrié con Pereza y me encantaron los Chikos del Maíz, y todo esto mientras la ciudad estallaba en la noche con canciones de Daddy Yanke, Tego Calderón, Vico C, qué música tan machista decía, qué vacía, y el pie se movía involuntario a la hora de la fiesta.

Aguanta un momento, nuestra sociedad es machista, el arte en general, espejo roto y sucio, pero espejo al fin y al cabo, es machista, el reggaeton está hecho por gentes machistas, sí, pero gentes machistas como las que hay en la música clásica, en el pop, en el rock, en la salsa.

Lo que sí creo es que el reggaeton es un género con música (en su mayoría) para un público adulto, si, adulto, así como en la televisión los Simpsons o Breaking Bad, o en la poesía un Bukowski, en el pop de Pereza, yo que sé.

Hay literatura erótica, hay posporno, hay fotografía de desnudos, hay filosofía de Marqués de Sade, hay el Cantar de los Cantares y libros rosa de 50 sombras para señoras aburridas, hay películas eróticas y todo eso está bien, hay reggaeton y más específicamente un trap explícito sexual con letras básicas, beats hipnóticos, perreo intenso y está bien.

El punk tiene tres notas y la rabia es su fuerza.

El reggaeton es el nuevo punk, une a la gente de la calle.

Las feministas promulgamos ser dueñas de nuestro cuerpo, pero si nuestro cuerpo decide perrear entonces ¿nos vendimos?, ¿no queremos evitar andar con un velo? La tercera ola del feminismo habla de decidir de nuestro cuerpo, en tanto, deseemos ser objetos sexuales o en tanto decidamos exponernos, el cuerpo es también un campo de batalla.

Hay chicas haciendo reguetón, diciendo este es mi cuerpo, diciendo si quieres llamarme perra, llámame perra, soy una perra, págame; el otro día descubrí a Cazzu

y aluciné, me recordó mucho a las Vulpess, una de mis bandas favoritas en la adolescencia, íconos del punk español, que cantaban: Me gusta ser una zorra, Sexo por la cara, Yo les mando a la mierda.

La mujer que hace reguetón en general tiene una actitud agresiva, el nuevo reguetón, rap, trap, que hacemos comos mujeres ya no es pasivo, las letras hablan de tener el control, de enseñar lo que nos ordenaron no enseñar, que para este mundo occidental es transgresor.

Mi ciudad es curuchupa y se asusta de oír culos y tetas en canciones por la radio, pero no se asusta de tener niños al lado de sus ríos turísticos jalando cemento de contacto sin tener donde dormir. El mundo entero se escandalizaba con el movimiento de caderas de Elvis Presley, el perreo provoca rechazo en una sociedad que se asusta de ver que somos cuerpos, animales, que tenemos deseos, y a la final también el perreo es un performance, es un espectáculo en que la sexualidad se confronta con una sociedad hipócrita que le gusta hablar del amor, del matrimonio, pero también de los celos, de la infidelidad y la infelicidad.

La música que revoluciona siempre viene desde la periferia, puede ser enteramente de izquierda o tal solamente negar el sistema, escandalizar, provocar.

Para terminar, confieso no saber cómo debería ser la regulación ni desde dónde para que niños y niñas de cinco años no canten Bad Bunny, me pregunto si la gente leyera más como prohibieran un libro para adultos al que un niño quisiera acceder. También creo que el reggaeton que hacen muchos y muchas si es machista, pero como comunista estoy convencida que para acabar con el machismo no hace falta censurar el reggaeton hace falta cambiar de sistema completamente.

Como diría el gran V, no es mi revolución si no se puede bailar.

Les recomiendo escuchar Mantenlo Patriarcal, rap feminista de IRA (si, se llama igual que una bandaza punk de Colombia) que termina su letra incendiaria con un gran baile de twerking, y no seamos tan puristas por favor ;)